EL LEGADO DE CHUCHOC BENÍTEZ
By: Wilson Herrera
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| Christían Benítez 1986-2013 |
Aún recuerdo el año 2005, un accidente automovilístico se empeñaba con la
vida de un grande del fútbol en el Ecuador; su sonrisa blanca se apagaba para
siempre, sus bailes típico nunca más se volverían a ver en todos los campos de
fútbol del Ecuador, ese futbolista con la máscara del hombre araña nunca más
se lo volvería a ver con su particular celebración después de hacer sus goles.
Aquel jugador que todos lo conocíamos como el OTIGOL o como el Spiderman
ecuatoriano se marchaba para siempre del fútbol, y con Él, el espectáculo, y la
alegría que trasmitía en cada partido mientras el espectador disfrutaba desde
el estadio, desde la comodidad del sofá en su casa, o como en mi caso, desde la
más reconfortable hamaca ubicada a unos 3 metros del frente del televisor,
disfrutando la retransmisión en vivo de los partido del campeonato de fútbol
nacional COPA PILSENER ECUADOR.
Ya
desde aquellos años el fútbol ecuatoriano empezaba a ser la marca de un fútbol
en donde la Alegría era la principal características de los mejores jugadores.
Pero en aquella mañana, los ecuatorianos estábamos de luto, ¡habíamos perdido ese
espectáculo adicional que hace del Fútbol que es ya un Lenguaje Universal la diferencia!. Juego al que todos los practican; unos como deporte y
otros como profesión.
Los ecuatorianos tuvimos que esperar mucho
tiempo para encontrar a alguien que volvía a dar al Fútbol ese valor agregado que es el
reflejo de la marca Ecuador, de un estilo, de una forma de juego, que
es la marca de un pueblo, de un país, de una sociedad.
Después de tanto tiempo, el Ecuador encontraba ya a Christian Benítez, a
ese jugador que necesitábamos, que en las filas del Club Deportivo el Nacional
se forjó y surgió hasta convertirse en un referente Mundial en este deporte.
Era un verdadero espectáculo del mejor fútbol que se veía cuando en el Nacional
se juntaban entre las bandas con la velocidad de Christian Lara, Por el centro el cholo David Quiroz, y por Izquierda
El Chucho Benítez que con su Potencia y Velocidad se convertía en el nuevo
rompe redes del fútbol ecuatoriano, lo que muy pronto el interés de los
grandes equipo de Latinomerica le llevó a vestir la camiseta del club de las
Águilas o América de México en donde saboreó el dulce
sabor de la Victoria convirtiéndose en el máximo astillero del Fútbol mexicano al salir campeón con éste, y que gracias al
aporte de sus goles terminaron con la sequía de títulos que el América venía
cargando desde hace muchas temporadas atrás en sus hombros.
El Amor al Fútbol que sentía el CHUCHO, y su insaciable sed por el
Gol no paraba, lo que le llevó a convertirse en el máximo goleador de la Selección
ecuatoriana de Fútbol (FEF); motivos de sobra que tenía, para que en meses anteriores le permitiese dar ese
salto hasta llegar a su nuevo equipo el Jaish Sports Club de Qatar en donde ayer por falta de atención médica hacía su último viaje, ¡el viaje que nunca mas tiene regreso!.
La noticia de su muerte golpeó muy fuerte a todos quienes habíamos seguido su brillante carrera deportiva, y que hoy, a su corta edad, le impidió llegar allá a donde Él seguro lo sabía: seguir cosechando más títulos, haciendo más goles, seguir engrandeciendo su Leyenda y con ella la Leyenda de un país del cual su amor por ella se sentía orgulloso y lo demostraba siempre.
La noticia de su muerte golpeó muy fuerte a todos quienes habíamos seguido su brillante carrera deportiva, y que hoy, a su corta edad, le impidió llegar allá a donde Él seguro lo sabía: seguir cosechando más títulos, haciendo más goles, seguir engrandeciendo su Leyenda y con ella la Leyenda de un país del cual su amor por ella se sentía orgulloso y lo demostraba siempre.
Recuerdo una frase, después de un partido oficial por las eliminatorias Sudamericanas en que la selección ganó con la mínima diferencia al equipo adversario, los
periodistas deportiva le preguntaron sobre el gol que hizo, a lo que con toda
naturalidad expresó: “Mi mujer me dijo, que si no hacía un gol
mejor que no regrese a casa” (Christian Benítez), lo que hizo que esta
frase fuese el titular en la mayoría de los periódicos deportivos del Ecuador
por su mensaje, por su sencillez cuando lo dijo, y por lo que significaba aquel
triunfo para la Selección en la carrera por las eliminatorias mundialistas.
Hoy Christian Benítez ya no está con nosotros,
y a sus 27 años de edad deja su Legado, su Legado de ser todo un Luchador en el
ámbito deportivo, Legado que con Alegría llenó de Gloria en las páginas del
deporte Nacional, el mismo que va dejando el camino hecho para que muy pronto desde el
Ecuador las nuevas semillas de este deporte broten con la misma sed de goles
conjugadas de Alegría como la que un día el CHUCHO las llegó hacer.
¡En México te Aman, en Ecuador te lloramos y
en el Mundo te Recordamos!
¡En donde quieres que estés Chucho, gracias
por tu Legado, gracias por tus goles, gracias por tanta alegría que un día nos trasmitiste y
por haber llevado al Ecuador allá a donde todos te querían llevar.!
¡Paz en tu Tumba!
By: Wilson Herrera
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Wilson Herrera
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